Juan Borus, titular del Sistema de Información y Alertas Hidrológicas del Instituto Nacional del Agua, anticipó que el descenso en las aguas del río Paraná continuará durante agosto y septiembre, aunque estiman que para principio de octubre haya una estabilización en los valores mínimos esperables.

En comunicación con Radio Dos, Borus también comentó que los caudales se mantienen bastantes estables en los últimos 10 días luego de las precipitaciones que se registraron en la cuenca de Iguazú y por las descargas y embalses que se produjeron en Brasil. Aunque sobre esto último, alertó que "en algún momento se va a terminar”.

En cuanto a la situación en esta parte del país, dijo que se espera niveles de 50 o 60 de cero de escala. Luego, agregó: "La situación de los pescadores artesanales en la provincia de Corrientes es grave, además tiene una fauna ictica que está siendo muy castigada no solamente por los niveles sino por la persistencia de la situación, y no se mejora con una lluvia aislada sino tiene que haber un cambio significativo”.

Sobre el rol de las represas hidroeléctricas, aseguró que las mismas “jamás pueden producir una bajante”. “El sistema de embalse tiene como objeto que el agua pase por medio de las turbinas y con eso se genere energía, Detener el agua significa no generar y por lo tanto no tener divisas”, explicó.

Por último, manifestó que está habiendo más consciencia sobre la preocupante bajante del río Paraná. A su vez, no descartó que a futuro tengamos que convivir con esta situación. “No estoy diciendo que esta sequía llegó para no irse más, pero podríamos tener otras situaciones de agua bajas. Es por eso que debemos incorporar hábitos culturales en el uso hídrico mucho mejor que lo tenemos ahora”, recomendó.

Fuente: Radio Dos