El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) dio a conocer ayer los números de la pobreza e indigencia del país, correspondientes al segundo semestre de 2022. En esta capital, teniendo como universo estadístico a una población de 387.168 personas, el índice de pobreza alcanzó al 45,2% de los ciudadanos económicamente activos (175.059 individuos).

En tanto, el índice de indigencia, entendido esto como la porción de pobres cuyos ingresos no alcanzan para comprar la cantidad mínima de alimentos para subsistir, se ubicó en el 9,4% (36.473 personas).

Si se traza un comparativo interanual, se puede observar que en el segundo semestre de 2021, Corrientes tenía una tasa de pobreza del 27,3%, lo que representa un 17,9% de crecimiento en solo un año.

Aunque hay que recordar que esa medición, por tan baja, fue cuestionada en su momento por las autoridades de la Provincia y generó que el INDEC realice una auditoria para ver si no hubo errores en el muestreo local. Finalmente, el organismo estatal ratificó los indicadores publicados.

En el rango de la indigencia, el cotejo interanual da cuenta de un alza del 1,8%, ya que en el segundo semestre de 2021 esa tasa era aquí del 7,6% y trepó al 9,4% a fines de 2022.

Hay que tener presente que el INDEC reflejó recientemente que la canasta básica total (CBT), que establece el umbral de la pobreza, aumentó 8,3% en febrero de este año, por lo que una familia tipo, de cuatro integrantes (dos adultos y dos chicos), necesitó $177.063 para no ser considerada pobre.

En tanto, la canasta básica alimentaria (CBA), que define la línea de indigencia, marcó también un incremento del 11,7%, por lo que ese hogar requirió de $80.483 para cubrir sus necesidades básicas para subsistir.

La región espejo

Entre las regiones del país, el Nordeste (integrado por Corrientes, Chaco, Misiones y Formosa) tuvo los mayores indicadores en pobreza (43,6%) e indigencia (10,3%) en el segundo semestre de 2022, lo que marcó un crecimiento del 4,2% (en igual período de 2021 el porcentual fue del 39,4%) y una retracción del 0,7% en indigencia (al cierre de 2021, el guarismo regional fue de 11%).

Volviendo al final de 2022, puertas adentro del NEA, el peor porcentual de pobreza lo tuvo el gran Resistencia con el 54%, seguido por Corrientes con el 45,2%, Posadas con el 43,1% y Formosa con el 34,4%.

En cuanto a indigencia, la mayor tasa fue para Resistencia con el 14,4%, seguido por Formosa con el 13,2%, Corrientes con el 9,4% y Posadas con el 4,8%.

Un "diagnóstico" social muy poco esperanzador

La pobreza ya afecta al 39,2% de la población argentina, según informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos sobre la base de datos relevados en el segundo semestre de 2022.

En total, en los 31 aglomerados urbanos relevados por el INDEC, hay 11,5 millones de personas en situación de pobreza, de los cuales 2,4 millones son indigentes, de acuerdo con la estadística oficial.

Pero en realidad, la cantidad de pobres es mayor, ya que la muestra del INDEC solo revela el universo de unos 30 millones de personas, cuando la cantidad de habitantes de la Argentina supera los 45 millones.

Ese semblanteo aritmético abarca a una parte de la población, por lo que si se proyectan a todo el país la, cantidad de pobres rondaría los 17,6 millones de personas.

Los datos se conocen en medio de un escenario marcado por la sequía, los salarios en baja y una inflación que no da tregua, por la que se presume que la tendencia seguirá en sentido ascendente.

Los analistas económicos (que abundan en el país) habían anticipado en la previa que el número de la pobreza superaría el 40%, un salto que se explica por la escalada del índice de precios, que cerró el año pasado con un alza del 94,8%.

Lo más triste de esta realidad es que los políticos, en pleno año electoral, usan estos indicadores para hacer sus "politiquerías" y se echan culpas entre oficialistas y opositores, a través de las redes sociales. Este año se elegirá al nuevo Presidente y la economía federal, en la previa, es un caldero a presión a punto de estallar.

En breve, los carteles inundarán la vía pública con consignas breves y prometedoras, rostros con risas editadas digitalmente y "latiguillos" fáciles para memorizar y repetir.

Los únicos privilegiados (no) serán los niños

El informe dado a conocer por el organismo estatal de estadísticas indica que la pobreza afecta al 39,2% de la población y al 54,2% de los menores de 15 años, aproximadamente unos seis millones de chicos argentinos.

Haciendo foco en el interior de ese dato, el 12% es pobre o indigente, mientras el 42,2% restante no llega a cubrir las necesidades de una canasta básica total.

Más allá de lo complejo de estos números, si se los compara contra el primer semestre de 2022, se puede observar que la pobreza en este segmento etario aumentó 3,3 puntos porcentuales.

Otro de los datos que dejó el informe es que el 50,1% del total de personas en aglomerados urbanos bajo la línea de la pobreza a nivel nacional, se encontraban en los partidos del GBA.

De esta forma, de los 11.465.599 de pobres relevados por el INDEC, 5.743.731 se encuentran en el conurbano bonaerense.

Debido a su alta densidad poblacional, el Conurbano Bonaerense sigue concentrando la mitad de los pobres del país.

La pobreza abarca al 45% de la población de la provincia de Buenos Aires, entre las tasas mas altas del país, luego de Corrientes y Gran San Luis (45,2%), Santiago del Estero (46,5%) y Concordia (55,2%).

Fuente: Diario época